Villancicos navideños: ¿por qué algunos lo adoran y otros lo odian?

El efecto de la música y el estado de ánimo
Por Tauana Matías.

Cuando llega Diciembre, una de las cosas que más se escuchan por las calles y por las casas son los villancicos navideños.
Me atrevería a decir que no suelen dejar indiferentes a nadie, al igual que la Navidad. Hay mucha gente que los adora y mucha otra que los detesta. ¿Y eso por qué será?

Para poder entender el poder que tienen sobre las personas, antes debemos de entender el efecto que tiene la música en general en el estado de ánimo y en nuestra forma de sentir.

Todos hemos experimentando en nuestra propia piel cómo la música nos hace sentir, nos hace emocionarnos y trasportarnos a otras épocas o recuerdos… La explicación de esto lo tiene el Condicionamiento Clásico.

Este principio en concreto es el encargado de explicar por qué un estímulo, como puede ser una canción, persona, lugar u olor nos puede elicitar ciertas emociones.

El motivo es debido a la asociación de estímulos. Un estímulo como una canción o un villancico puede ser neutro para nosotros, es decir, no generar ninguna emoción, pero si se asocia con una situación o persona que nos genera una emoción previa, éste empezará a generar una emoción similar.

Es por esto por lo que a las personas que les suele encantar las Navidades o los villancicos, suele ser porque a lo largo de su vida han tenido muchas asociaciones donde durante las Navidades sucedían cosas o estaban con personas que le hacían sentirse bien…por eso ahora cuando ven cualquier estímulo relacionado con las Navidades, como pueden ser los villancicos o las luces…sienten emociones similares.

Lo mismo pasa en el caso contrario: personas que odian la Navidad suele ser porque han vivido experiencias negativas en esta época, tienen un mal recuerdo, o simplemente no han vivido ninguna experiencia buena y al comprarse con lo que la sociedad dice que “deberían vivir en Navidad, lo acaban viviendo de manera más aversiva.

Esto se vive de forma más intensa aún, cuando lo que asociamos son canciones u olores. Los sentidos potencian asociaciones más estables o duraderas…por eso, al escuchar una canción o villancico, esta puede transportarnos a ese día, haciendo que rememoremos la persona con la que estábamos, lo que estábamos comiendo u haciendo… y no solo nos ayuda a revivirlo sino también a sentir una emoción similar a la que sentimos en ese momento.

Algo que todos tenemos que saber, es que podemos crear nuevas asociaciones, nuevos condicionamientos… atreviéndonos a crear nuevas experiencias en esas fechas o en presencia de esas canciones, para que en un futuro pueda generarnos emociones más placenteras.

Conoce más de mi psicólga

Tauana Matías es licenciada en psicología por la Universidad Autónoma de Madrid, máster en Modificación de Conducta por el Instituto Terapéutico de Madrid (ITEMA) y experta en Autismo por la Universidad Europea Miguel de Cervantes y Gatea Atención Global.

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